lunes, noviembre 29, 2004
Kenny contra Spenny
Como ya se los había mencionado hace meses, mi reality show favorito es “Kenny contra Spenny”, el programa perfecto para desintoxicarnos de basuras hediondas como “The Ashley Simpson show” y “El Aprendiz”.
El programa funciona de la siguiente manera, estos amigos han sido trasladados a vivir a la misma casa y deben enfrentar los desafíos semanales que les impone la producción, no se trata de desafíos extremos, son sólo cosas comunes como bajar de peso o reunir más dinero, el perdedor será sometido a “la humillación”.
El chiste del programa es que Spenny es un cursi bonachón que sigue las reglas sin dudar, íntegro e incapaz de hacer las cosas fuera de la ética, mientras que Kenny es un malvado tramposo, que con sus bribonadas siempre trata de sabotear a Spenny, lográndolo la mayoría de las veces y siempre rompiendo las reglas.
El reto del programa pasado fue cuidar a un bebé, pero no a un bebé real, se trataba de un bebé electrónico y sofisticado, que registraba en un chip todos los cuidados que se le daban, un bebé para Kenny y otro para Spenny, ¡y empezó la diversión!
El chiste del programa es que Spenny es un cursi bonachón que sigue las reglas sin dudar, íntegro e incapaz de hacer las cosas fuera de la ética, mientras que Kenny es un malvado tramposo, que con sus bribonadas siempre trata de sabotear a Spenny, lográndolo la mayoría de las veces y siempre rompiendo las reglas.
El reto del programa pasado fue cuidar a un bebé, pero no a un bebé real, se trataba de un bebé electrónico y sofisticado, que registraba en un chip todos los cuidados que se le daban, un bebé para Kenny y otro para Spenny, ¡y empezó la diversión!
Mientras Spenny se desvivía cuidando a su bebé, golpeándole la espaldita para que eructara, le cantaba, lo paseaba en el parque y hasta lo llevó con él a un curso de mamás responsables, el pérfido Kenny hizo todo lo contrario y se tiró de pedos en la cara del muñeco, lo golpeó, nalgueó, metió su cabecita en el excusado, lo desmembró, lanzó del bungee, lo mordisqueó, decapitó, lo llevó al parque pera hacerlo sufrir en los columpios, el subeybaja, lo sumergió en la arena, y lo más divertido, ¡lo desnudó y cubrió de migajas de pan para que fuera picoteado por las palomas!, ¡jo, jo, jo, jo, jo!
Pero Kenny tenía un plan, y mientras el tonto de Spenny dormía, cambió a los bebés y ganó la competencia, ¿el resultado?, Spenny sufrió “la humillación” y fue colocado en una cuna gigante en plena banqueta de una concurrida avenida, vestido como el bebé más ridículo del planeta y siendo señalado por todos los transeúntes (cuyas carcajadas retumbarán para siempre en la cabeza del ñoño Spenny). Fue casi tan divertido como cuando tuvieron que competir por ver quién interpretaba a la mejor mujer, ganando “Spennytah” (Spenny), mientras que “Kendra” (Kenny) tuvo que salir con su disfraz de mujer a talonear por las calles, como una hilarante prostituta travesti.
Pero Kenny tenía un plan, y mientras el tonto de Spenny dormía, cambió a los bebés y ganó la competencia, ¿el resultado?, Spenny sufrió “la humillación” y fue colocado en una cuna gigante en plena banqueta de una concurrida avenida, vestido como el bebé más ridículo del planeta y siendo señalado por todos los transeúntes (cuyas carcajadas retumbarán para siempre en la cabeza del ñoño Spenny). Fue casi tan divertido como cuando tuvieron que competir por ver quién interpretaba a la mejor mujer, ganando “Spennytah” (Spenny), mientras que “Kendra” (Kenny) tuvo que salir con su disfraz de mujer a talonear por las calles, como una hilarante prostituta travesti.
Disfruta de Kenny contra Spenny todos los domingos, a las 5 de la tarde por FOX (en el mismo canal, los lunes, disfruta de otro buen reality show “Cambiando esposas”).
