martes, junio 15, 2004
Exigimos justicia
Pena capital para Paulina Rubio por su último video "algo tienes", la canción es desastrosa por si misma, llega a profundizar en la tontería como nunca antes se había visto, supera por mucho a Arjona y a las frases positivistas del reverso de la caja de choco krispies, y en conjunto con el pedorro video es un verdadero caos.
Paulina pretende ser una "chica mala y sexy", que acompañada de su pandilla de lesbianas-prostitutas-kitsch arma un rave en plena vía pública, es una experta d.j. que moja a todos con una manguera (¡ay! que rebelde, ni Belinda es tan malvada, es tan mala como Thalía en "a quién le importa")y cachondea con Bob el constructor versión porno. Bien hacen en enrollarla de plástico rotulado (dice "PRECAUCIÓN"), parece una encantadora momia, uno de los cuatro jinetes del Apocalipsis (el hambre o la peste, elijan). Por cierto, la última parte en versión remix es horrenda y detestable, todo el video me hizo reir y dudar de mis facultades mentales. Como dice mi estimada Laura Bozzo, ¡¡¡A LA CÁÁÁRCEL!!!.
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Pena capital para Paulina Rubio por su último video "algo tienes", la canción es desastrosa por si misma, llega a profundizar en la tontería como nunca antes se había visto, supera por mucho a Arjona y a las frases positivistas del reverso de la caja de choco krispies, y en conjunto con el pedorro video es un verdadero caos.
Paulina pretende ser una "chica mala y sexy", que acompañada de su pandilla de lesbianas-prostitutas-kitsch arma un rave en plena vía pública, es una experta d.j. que moja a todos con una manguera (¡ay! que rebelde, ni Belinda es tan malvada, es tan mala como Thalía en "a quién le importa")y cachondea con Bob el constructor versión porno. Bien hacen en enrollarla de plástico rotulado (dice "PRECAUCIÓN"), parece una encantadora momia, uno de los cuatro jinetes del Apocalipsis (el hambre o la peste, elijan). Por cierto, la última parte en versión remix es horrenda y detestable, todo el video me hizo reir y dudar de mis facultades mentales. Como dice mi estimada Laura Bozzo, ¡¡¡A LA CÁÁÁRCEL!!!.
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